Prólogo

"...-Preferiría vivir aquí por siempre Andy- dijo Amelia mientras se recargaba en su hombro

-Yo también, Amelia- dijo mientras la veía de reojo 

Ese fue su último atardecer juntos antes de que ella se fuera para siempre de sus brazos, Andrés pensó un poco cual seria su ultimo acto par demostrarle lo que sentía en verdad, así que le susurro delicadamente en su oído lo que sentía por ella. Amelia se levantó y lo miró fijamente a los ojos, ambos estaban con cierta rubor en las mejillas. Andrés puso su mano en la mejilla de Amelia y la acercó lentamente hacia él... Cerraron poco a poco los ojos y dieron un ultimo respiro para dar un suave y dulce beso..."

-¿Y qué tal?- dije después de leer mi historia

-Está un poco triste y emocionante a la vez- dijo mientras se secaba unas lágrimas

-Aura The Hedgehog- dijo una voz femenina mayor a la otra - ¿Cómo se te ocurrió hacer una historia de amor?

-Pues...-dije un poco nerviosa- ya sabe... hoy es 14 de febrero... y ...

-Me gusto- dijo sonriéndome.

-¿En serio?- le devolví la sonrisa.

-Claro.

Mi nombre es Aura The Hedgehog, una eriza color negro con ojos terracota, este era el final de mi primera historia, tenia 5 años y había leído todos los libros de ciencia, historia, matemáticas y español,  novelas de amor, de ciencia ficción, y más aún que había en la biblioteca del "Atlantic Rain", mi mejor amigo se llama Maikel The hedgehog, un erizo color blanco de ojos azules, el que dijo que le gusto mi historia, tiene 6 años y siempre anda conmigo, platicando y recorriendo todo el laboratorio, el hace canciones hermosas y poesías largas y cortas, sabe tocar cualquier instrumento que le des, siempre me ayuda cuando me meto en problemas y pleitos con la chica que lloro mientras narraba... Ella es...Marissa The Butterfly, una mariposa color rosa con violeta, no me llevo mucho con ella, me trata como una sirvienta, a pesar de que tiene la misma edad que yo, se cree demasiado... Odio su personalidad competitiva... La voz de mujer mayor era la doctora Jennifer Deimon, la directora de todo el "Atlantic Rain", ella nos trajo a los tres a este lugar tan raro cuando nosotros apenas eramos unos bebés... Y bueno, se acaban las descripciones de los que conozco, me fui a sentar cerca del escenario improvisado, Maikel pasó con una guitarra y empezó a tocar una melodía tan hermosa que se quedó grabada en mi mente... 


Cuando terminó de tocar, me miro fijamente con esos ojos azules y me sonrió... yo desvié la mirada, ruborizada y dando risitas infantiles. Me paré y les dije que me retiraba... Corrí a mi habitación, abrí la puerta y la cerré suavemente, mientras me caía lentamente, suspirando por aquella mirada de Maikel... Mi corazón latía fuertemente... No sabía como explicarme a mí misma porque actuaba así...